Pueblo salitrero se convierte en campo de prisioneros
A comienzos de noviembre de 1973, cuando el Estadio Nacional comenzaba a vaciarse en preparación para el partido entre Chile y la Unión Soviética por las eliminatorias al Mundial de Alemania 1974, cientos de detenidos fueron trasladados hacia el norte. El recinto deportivo, que durante casi dos meses había funcionado como el principal centro de detención política de Santiago, debía “volver a su uso normal”. Bajo ese pretexto, los prisioneros fueron subidos a buses y aviones militares con destino al desierto de Atacama.